Nos Quedamos sin Agua

Rafael Pujols.                                  Monción.- Todos los sectores productivos y amas de casas de la región Noroeste, exigen de manera permanente un eficiente suministro de agua potable, pero ningunos de ellos se ha mostrado interesado en ir a reforestar las cuencas altas y donde nacen los ríos que alimentan el Acueducto del Noroeste.         

Solo se escucha decir, que la presa de Monción estás en su más bajo nivel, qué no llueve, que se desmontó y quemó tal zona; pero nadie muestra interés de organizar jornadas de reforestación aguas arriba del río Mao, Amina, Guayubin, Gurabo, Cana, Clavijo, entre otros afluentes de la región, para así recuperar las zonas que han sido taladas indiscriminadamente y quemadas sin ningún tipo de control.                                                  Entiendo que para hacer cumplir la ley y los mandatos que propician la conservación y protección del Medio Ambiente y los recursos Naturales, no es necesario que haya que legislar otras leyes, sino hacer cumplir las que tenemos vigentes en esa materia.            

Muchas veces hemos visto como algunos productores agrícolas, talan cada árbol en las orillas y muros de sus predios con tan solo la intención de ganarse unos pesitos más, sin que les importe el daño causado al medio ambiente, y en el peor de los casos a los recursos naturales que tanta falta les hace a ellos para poder continuar sembrando los comestibles que consume la población en sentido general.     

Por tal motivo, quiero exhortar a mis hermanos productores agrícolas, las autoridades competentes, a los grupos comunitarios, los centros educativos, las universidades, entre otros grupos sociales de la región en general, a crear conciencia sobre la importancia del recurso agua y propiciar grandes jornadas de forestación a orillas de todos los afluentes de la región Noroeste y el resto del país.          Quiero pedirles, con mucha humildad, sin intención de hacer daño, que por favor ya es tiempo de recuperar las zonas boscosas que han sido devastadas por personas sin escrúpulos, que pongan dentro de sus programación de éste año 2016, la realización de jornadas de siembras, en el entendido que solo así podríamos volver a tener abundancia de lluvias y ríos caudalosos.